
Quisiera que no terminara el día, anhelo no terminar el camino; las interminables curvas se entrelazan unas con otras como si de mis ideas se tratara; caminante no hay camino, caminante no hay distancia que no se pueda alcanzar.
Nostalgia corre en mi cuerpo del camino al andar, dichoso aquel que viva en libertad, esa libertad que inspira a soñar y sueño que vivo en libertad, rodando voy y no quisiera nunca llegar.
Héctor López Espíndola