Pues hoy por la tarde me salió la vena animal, entiéndase cabra, (ojo no cabr*n) y me eche al monte. Llegué agotado, y eso que fue un par de horas nada más, pero los caminos estaban destrozados debido a las últimas lluvias torrenciales caídas esta semana. La moto se portó de cine, lo que si tengo que comprar sin falta es un protector de bajos y las defensas, un par de veces toqué con el caballete y no me quiero imaginar lo que pasaría si toca el escape o el filtro de aceite.