Pero hasta ahora no me había dado por buscarle cosillas por la red, y mira por donde, os he encontrado a vosotros. Llevo enganchado leyendoos desde hace unos días, y me temo que voy a seguir así en los pocos ratos libres que saque.
Mi historia es como la de muchos otros compañeros del foro: A mis treinta y tantos, hacía diez que por motivos principalmente económicos no tenía moto. Eso si, alquilaba alguna de vez en cuando para acallar el mono.
Hace un año me lie la manta a la cabeza y me lancé. Con miles de comparativas leidas en las que salia mi querida... Transalp :oops: y sus rivales.
Alquilé unos días la Translap y me encantó, y a mi chica también, pero no quería quedarme con el gusanillo y concerté una cita para usar una unidad de pruebas de la V 650 que me dejaron un par de horas. Creo que era una k5. Roja y negra, preciosa. Y ahí fue el flechazo. En autovía, que deciros. Fuerza de verdad. Ahora si notaba que tenia dos cilindros entre las piernas. Me metí por una pista (en realidad una autovía en obras, jijiji) y pillé unos cuantos baches y no vi suficiente diferencia como para decidirme a favor de la Honda, con la que me sentía igual de torpe. Y cómodísima, y aun mas para mi chica, que no lo dudaba.
Siendo así seguí un consejo que lei una vez y me pillé la moto que mas baba tenía en el depósito después de bajarme para probarla.
Pues la encargué. Una K7 negra mate (el color ideal, mi última moto la pinté de negra mate ;-) ) y como había poca diferencia, con ABS, que una de mis dos piñas probablemente la habría evitado con él instalado.
Me llaman de concesionario. Ya está la moto allí. Tienen otro cliente esperando, que si la sigo queriendo...
Esa mañana mi mujer me dice que está embarazada.
¿Que hago? ¿La recojo?, ¿me echo atrás?, ¿encargo una tril pequeñita para bichear cerca de mi casa?
Yo mi moto la compré para hacer viajes de unos 5 días cargado hasta la bandera (pillé al comprarla las givi laterales keyless de 46 l, preciosas y comodísimas) y ahora la cosa iba a cambiar.
Me lancé. La compré. Seguramente hoy día no compraría la misma moto, pero tengo que decir que con aun no he llegado a los 5000 km pero solo me ha dado satisfacciones.
Ahora que mi niña tiene ya 3 meses y mi mujer está mas recuperada, estoy empezando a cogerla un poco más y me encanta. Dócil, potente, agradable de conducir... Un gusto para mi que nunca busco el límite, pero estoy seguro que su lado deportivo está ahí.
Y por supuesto. Me alegro de habermela comprado.
Si un día os cruzais con una V negra mate con unas grandes maletas con su jinete todo de negro viajando solito a ritmos legales, probablemente sea yo. Si me veis, paradme que seguro que me tomo una cerveza con vosotros. ;)
Ráfagas (ilegales
