

sin contar con la publicidad gratuita....



ahora me toca daros las gracias a tod@s vosotr@s... cualquier cosa que os diga es poco...de veras...para mí ha sido un autentico placer ir siguiendo la evolucion del cuento y vuestros comentarios....creo que mi ego ha crecido por lo menos un palmo....


solo puedo deciros a tod@s que gracias de corazon por haber estado ahí... si algún día nos encontramos por la carretera teneis una birra o lo que querais que os la debo.
a parte de la historia,me encanta que os haya gustado la musica...algunos ya conocerias las canciones,pero a los que las hayais descubierto ahora espero que las disfruteis tanto como yo...a veces una simple canción en un momento adecuado puede servir de mucho...¿no creeis...?
y ya para dejar de dar el coñazo, cumplo la promesa que le hice a "mi editor" el señor spauser, un ultimo capitulo,que solo se colgará en esta pagina, este os lo dedico...muchas gracias de nuevo,repito,un placer.
p.d. Spasuser me preguntó si tenia algun cuento más... y me temo que así es...si quereis leerlos, los podeis encontrar en mi blog...http://sulacogsxr.spaces.live.com/ espero que los disfruteis y que dejeis algun comentario...el blog es nuevo y es un poco soso aún.
abrazos pa los chicos y besos pa las chicas.
amenazo con volver....


SULACO.
- epilogo -
Parece mentira que ya hayan pasado siete años desde la ultima vez que la vi, nos cruzamos ante ayer en la T-4 de barajas, yo regresaba de firmar un contrato con un jeque saudita para construirle una replica exacta de un audi quattro grupo B como con el que se mató Walter rohl y ella emprendía las vacaciones de semana santa con su marido y un crió.
No se si fue coincidencia o cosas del destino, pero mientras por mi viejo y fiel Mp3 sonaba una viejísima canción titulada “susie blue” de un grupo extranjero llamado Alaska pensé en ella y justo entonces fue cuando al doblar una esquina nos topamos de frente, así que no pudimos fingir como que no nos habíamos visto, fue una extraña sensación cuando nuestros ojos se encontraron, por un segundo el mundo se detuvo y solo existimos ella y yo, casi sin quererlo, en mis labios se empezó a formar una sonrisa y mi corazón aceleró su pulso, también ella reaccionó de forma parecida, aunque solo fue durante un instante, retrocedimos ambos en el tiempo y volvimos a revivir a cámara rápida nuestro pasado.
Intercambiamos un “hola ¿Qué tal?” que sonó un poco extraño y nos quedamos mudos como dos idiotas ante la expectante mirada de su marido.
Ella reaccionó primero y me dio un abrazo y un par de besos en las mejillas que me parecieron un poco forzados, a continuación me presentó a su marido y a su hijo, aunque yo respondí y actué como un autómata, ya que mi cabeza seguía en el pasado.
Su marido me miraba receloso, no podía reprochárselo ya que mis ojos no hacían más que recorrer el cuerpo de Susana de arriba abajo, estaba incluso más bella que antes, las protestas por aburrimiento del crió me hicieron reaccionar.
Charlamos un par de minutos de lo que nos había deparado la vida estos siete años sin vernos y fue tiempo más que suficiente para que se me rompiera el hechizo, volví al mundo real, solo de pensar de que podría haber acabado así, casado y con hijos, me daban escalofríos.
Puse fin a nuestro encuentro alegando tener mucha prisa y nos despedimos con la intención de quedar un día para tomar un café y ponernos al día, cosa que los dos sabíamos no iba a suceder jamás, y seguimos nuestros caminos.
Mientras viajaba en un taxi hasta un aparcamiento privado donde me aguardaba mi nueva joya, el último de los delta integrale que se fabricaron,
Mi cabeza volvía una y otra vez atrás, recordando los viejos tiempos, cuando yo solo era un chaval más valiente que sensato, las sensaciones que experimente entonces nunca han vuelto a ser tan intensas y emocionantes, quizás por eso sigo soltero, cuando has probado el jamón de bellota ¿quien quiere volver a la mortadela?
El sexo, aunque no me ha faltado, no es ni parecido, no es que sea un retrogrado de esos que piensan que el sexo sin amor no es lo mismo, ni que no disfrute cuando lo práctico, pero cuando la cabeza no acompaña al cuerpo, la cosa no sabe igual.
Lo que más me jode es que no la echo de menos para nada, estoy encantado con la vida que llevo, no deseo nada más que seguir así, pero tengo que reconocer que algunas veces, en la cama de un hotel, cuando me despierto y al girarme encuentro el otro lado de la cama sin deshacer, siento dentro de mí una especie de vació que no se como explicar, y muchas veces se me viene ella a la cabeza.
Ya se de sobra que no se puede tener todo lo que uno desea en esta vida, sino seria un completo aburrimiento, pero a veces siento rabia, y lo único que logra calmarme es desfogarme en alguna carretera solitaria con mi moto, por que una cosa si que tengo claro…. Donde este mi susi que se quiten todas las Susanas.