Como much@s ya sabéis, cada año, Honda facilita la prueba de algunos modelos a través de su “Honda Day”. Este año, al igual que el pasado he vuelto ha probar el mod. CBF600S y por partida doble.

Aún conservo esa sonrisa de satisfacción compartida con un sentimiento agridulce. Intentaré explicarme dejando un lado los tecnicismos, tod@s sabemos que las motos tienen unas características técnicas, pero también nos transmiten emociones, y sentimientos.
Salimos de Linares un poco antes del medio día y para las 15:30 ya estamos en Granada. Llamo a mi hermano para que nos acompañe, haga de GPS


El Piloto.


Llegando a Granada.

Mi hermano, Sara e Irene.

A partir de ahí y al igual que en la pasada edición, el corazón me empieza a latir con más fuerza de lo normal. La emoción?, los nervios?.
Nos damos una vuelta de reconocimiento viendo los modelos que este año Honda deja probar. De algunos de los modelos que hay para la prueba no tendría ningún inconveniente en que estuvieran en mi garaje de libre disposición.

Al Padrino le gustó ésta. Yo creo que ve demasiado House.



Irene y Sara se decantaron por una Mega-Scooter

El papi probó varias. En un principio parece que también mira con buenos ojos la CBF, pero la 1000

Aunque tampoco dejo de “saludar” a esta bonita Pan…

A pedro le gusto el diseño del a VFR, pero eso de ir tan “acostado”…

A mí también me gustó mucho:


Esta moto es muy cómoda. Yo creo que el asiento es de gel.

Nos acreditamos, la charla de rigor de los monitores y empieza la fiesta….




Esta CBF es la que probó Pedro.

Me voy en busca de mi moto y empiezo a notar un hormigueo en el estómago. Este año estoy aún más contenta. Han bajado el asiento, así que desaparece el miedo de “no poder” con la moto. Llego bien al suelo, es una moto que cautiva a primera vista. Y este año al estar el asiento colocado en su posición más baja y llegar mejor al suelo, en parado se maneja mucho mejor.

Meto la llave, arranco y pienso en silencio mientras oigo el bonito sonido del motor… Te lo vas a pasar en grande. Sólo tenía estos km.



La primera toma de contacto es muy buena. El que las manetas de freno y embrague sean acodadas, facilita mucho su uso para una mano pequeña como la mía. El alcance de los mandos es más relajado y más rápido. El manillar elevado te hace tener una posición erguida durante la conducción, con lo que no se cargan ni manos, ni muñecas, es una conducción muy cómoda. La posición bajita del asiento, solo 77 cm. me resulta muy confortable para mi estatura.
Me sorprende gratamente el radio de giro. El motor (77 Cv) me gusta, es de respuesta dulce. Con mayor par y aceleración. Es una moto que ofrece potencia de bajo a medio régimen, y que sube de vueltas cómodamente y con fuerza. La aceleración es suave e instantánea, y el par a bajo régimen ayuda a minimizar que la moto se te cale, empujando lentamente desde el ralentí nada más soltar el embrague. Aunque no me gustó como estaba regulado el embrague, tenía que haber tocado un poquito la ruedecita y dejarlo a mi gusto.
En el tramo de curvas que recorrimos compruebo lo fácil que es tumbar con esta moto, así como el aplomo durante la trazada. También me gustó mucho la respuesta de la moto al abrir gas en las salidas de las curvas. Es una moto accesible. Tiene un cambio rápido.
La frenada es de gran respuesta. Monta discos flotantes de 296 mm. con pastillas de metal sintetizado y en la parte trasera monta un disco de 240 mm. Tampoco los puse a prueba extrema, no era plan de montar un desaguisado si te equivocas en la frenada, además, había tramos en obras y con gravilla. Pero lo que probé me gusto como se comportó la moto.
En cuanto al tema de la protección del aire, si es cierto que me ví un poco desprotegida, pero claro, en la Vstrom, al ser yo pequeñita y llevar pantalla alta me encuentro muy cómoda, apenas me da aire. En cambio en la CBF me dí cuenta de dos cosas:
1ª. Tendría que cambiar de casco. El ruido es horroroso
2ª. Poner una pantalla más alta.
Durante la prueba paramos a repostar



Cuando toca el fin, tienes ese sentimiento agridulce e intentas recopilar en tu cabeza todo lo que te ha transmitido la máquina, cuesta devolver la llave. En definitiva, me embriagué de moto durante los 30 km. Aprox que rodamos. El tiempo pasó muy rápido, demasiado rápido. Así que como nos habíamos quedado con ganas de más, solicitamos nuevamente realizar otra prueba. Esta vez los dos en una moto. Una bonita CBF600S roja, equipada con maletas (Pedro ya la había probado antes solo)

De la segunda prueba tengo que decir que no me convenció el asiento trasero. El de la V es muchísimo más cómodo. Y en cuanto al a protección frente el aire… en la V ni me despeino


Resumiendo un poco diré que fue divertido, intenso y emocionante. A través de los Bt comentábamos las sensaciones que nos iban transmitiendo las motos. Al igual que el año pasado, durante el trayecto, volvimos a ser cómplices de risas, júbilo, afición y sensaciones. Gracias Papi.


Pd. Cómo este año nos hemos quedado con las ganas de probar la CBF1000, creo que será la elegida para el próximo Honda Day 2010.