Pero estaba harto de ver aletitas de mi radiador dobladas (aunque solo sean 3 ó 4) y decidi ponerme manos a la obra.
Encontré un tipo de rejilla de metal, ya troquelada, muy resistente (en próxima entrega, fotos) y tomé la medida interior del radiador, solo lo que queda entre las piezas negras laterales. Tras un par de cortes con la amoladora circular (radial la llaman en mi tierra), ajustaba a la perfección. Ahora solo quedaba hacerme con un par de sargentos o en su defecto unas correillas de electricidad, bien largas, para sujetarlo al radiador, pero, de paseo por un super pensé, ¿y que tal unos cacharros d eesos que se usan para que no se vuelen los manteles con el viento? Y encontré unos metálicos muy sencillos y bonitos. La medida era la idonea. Parecian hechos para el radiador de la V.
Y aquí está el resultado.



