
De un tiempo a esta parte da autentico asco leer un periodico, ver la tele, oir la radio, e incluso publicaciones via internet en forma de web o blogs.
Si el estamento político y judicial se había ganado nuestra ausencia de confianza, el periodistico a caido más bajo, si cabe.
Es igual que las noticias sean económicas, políticas, de sociedad, religiosas, bélicas, deportivas, hasta las críticas de cine


Mi más sincero desprecio para aquellos autollamados periodistas, que para mi son picaletras soplagaitas, que a sueldo de poderes ocultos manejan, distorsionan, manipulan la información para influir en oscuros intereses. Han pasado a ser una arma más de estos poderes, que por otra parte ya sabemos todos quienes son.
Mal aventurado aquel que deposite su fe en palabras de tan poca honestidad, dudosa veracidad y ausencia total de objetividad, y no vale aquello del color del cristal...
Hemos asistido, en pocos lustros, al nacimiento y consolidación de dos grandes grupos de comunicación, que están a manos de poderes económicos, y utilizan todas sus armas para influenciar, no para informar. Parapetados en la profesión de periodismo, han hecho cambiar gobiernos, leyes, han creado odio entre habitantes de un mismo país, han renacido viejos rencores ya olvidados y han creado fantasmas a su antojo.
No nos olvidemos que:
Los politicos se presentan... pero nosotros los escogemos, y si no tienen nuestro soporte desaparecen.
Pero los periodistas , ni se escogen popularmente, ni se les puede hacer desaparecer, son como un grano en el culo, y en este caso el nuestro.
A los periodistas, desde aquí, les muestro mi más profundo desprecio, por dejar pudrir la confianza en la verdad, que tenía que estar al margen de intereses. Una cosa es saber cual es el cristal por el que se mira, y el otro es hacernos pasar por ruedas de molino.
Estoy seguro que ningún periódico me querría publicar este articulo protesta.