
La convocatoria era a las 8:30 h en la gasolinera del km 12,6 de la N-II. La mañana era fría y el seguimiento de la convocatoria una incógnita.
Pronto se despejaron las dudas, la "marea naranja" acudió temprano.


A la hora prevista partimos por la N-II rumbo a Alcalá de Henares y Guadalajara. Moteros y moteras se fueron incorporando a la marcha. Las V no pasaban desapercibidas.


A la altura de Torija, si vivió el primer momento de tensión. La G.C. nos sacó de la autovía y nos detuvo en el cruce por espacio de media hora.

Desde aquí, nos separaron en diferentes grupos, de unos 40 cada uno, y proseguimos hasta el km 90 donde volvieron a pararnos. Esta vez, en el arcén, la tensión fue mucho mayor ya que comenzaron a fotografiar las matrículas de las motos. El atasco que se formo por este motivo fue de órdago. Tras la negociación correspondiente, se acordó que nos escoltarían, un coche delante y otros cerrando el grupo, hasta Alcolea del Pinar, final del recorrido.



Como siempre, hemos recibido el apoyo de muchos vehículos y el mosqueo, con algún que otro insulto, de otros. La realidad es que ha sido un éxito y nueva demostración de lo que realmente es el espíritu motero.
Y seguiremos, claro que si, con firmeza y rabia contenida por la injusticia que supone cada "compa" que cae en la carretera.
Nosotros no olvidamos.
Va por vosotros.
