Esto me pasó con mi primera V. Yo soy de los que acostumbra a llevar apoyada sobre los estribos la punta de las botas (bueno, no extactamente la punta pero ya me entendeis) y un día volviendo de una rutilla dominguera y circulando por autopista, conforme me acercaba a la salida que debía tomar empecé a relajar el puño y llegado el momento fui a bajar de marcha. Coloco mi pie en posición y ¡sorpresa! no pillo la palanca de cambio (he puesto mal el pie? pienso...), así que me concentro en hacer de nuevo la operación y nada, no encuentro la dichosa palanca con el pie. Echo una miradita rapita y J*DER!!! la palanca de cambio ha desaparecido !!!!.
Tomo la salida y aminoro la velocidad pillando el embrague hasta que detengo la moto. Me bajo y la reviso con una cara de
